Por qué es mejor la clase online

Porque queremos enseñar la ciencia matemática a todos los estudiantes atrapados en las dificultades de la enseñanza reglada y la clase online nos permite llegar a cualquier hogar que esté conectado a Internet, con independencia de donde vivan las familias. También porque queremos expandir nuestro novedoso y excelente Bachillerato en Inteligencia Artificial con título de Máster a todos los rincones del mundo.

Además, la mayoría de profesores de matemáticas podrían ser sustituidos por pantallas en las aulas, proyectando sus clases con vídeos de YouTube equivalentes y nadie notaría la diferencia en el rendimiento académico de los alumnos. Aún mejor, seguramente subiría si son tutorizados online mediante un híbrido entre Inteligencia Artificial y un profesor que supervisa por chat el progreso del trabajo académico.

Por otro lado, la pandemia ha demostrado que muchos docentes no están preparados para desarrollar el potencial de las nuevas herramientas tecnológicas. Excluidos de las clases presenciales por las necesidades sanitarias, al no poder apoyarse en los libros de texto de las editoriales y las pizarras de sus aulas, han sido en gran medida incapaces de responder al reto que tenían demostrando una vez más su falta de formación para adaptarse al entorno académico y tecnológico del siglo XXI. Como estas afirmaciones suelen levantar protestas, recomiendo que el lector busque cómo han superado con creces estas dificultades los profesores de Harvard y el MIT. Gobiernos de todo el mundo manejan presupuestos infinitamente superiores a estas dos universidades en Educación, pero sus resultados son decepcionantes en comparación.

Nos reservamos la opinión que tenemos sobre las Consejerías de Educación de las Comunidades Autónomas españolas. Entre otros motivos por que todavía estamos esperando sus informes sobre qué han hecho los profesores con sus alumnos durante los confinamientos del Covid-19. Los ciudadanos pagamos esas nóminas con nuestros impuestos y exigimos transparencia. Mientras tanto la respuesta de las administraciones ha sido un aprobado generalizado, demostrando la envergadura de un desastre que ya no son capaces de esconder.

Las familias desconocen que en España hay 17 libros de texto de matemáticas diferentes para cada curso escolar porque hay 17 Comunidades Autónomas. Pero sumando todas las asignaturas y cursos lectivos las editoriales tienen que crear 51.530 libros de texto diferentes para satisfacer los absurdos caprichos de esos directores de contenidos autonómicos, obligados con 1.700 normas jurídicas de adaptación curricular desarrolladas en los últimos 10 años. En Canarias no se pueden mencionar los ríos porque no hay en las islas, mientras que en Cataluña están prohibidos los Reyes Católicos y la corona de Aragón es la corona catalano-aragonesa. En Baleares exigen diferenciar los contenidos para la isla de Formentera. Pero en la región uniprovincial de Murcia quieren promocionar los productos de sus huertas, mientras que los riojanos imponen exaltar la importancia de sus vinos. Los gallegos exigen que los libros de texto reconozcan el norte de Portugal como parte de su territorio y en Andalucía han hecho una ley para que en Primaria se enseñe a contar con las baldosas de la Alhambra. Un caso grave es el de la comunidad valenciana, pues impuso el veto en sus libros de texto al fallecido filólogo y director de la RAE Fernando Lázaro Carreter por decir que el valenciano era un dialecto del catalán. Pero el caso más surrealista es el de Castilla la Mancha, al imponer también por ley que se diferencie la explicación de la caja de cambios de un coche en los libros de Formación Profesional. Aquí tienen el enlace para comprobarlo.

En Quantitas hace tiempo que nos hemos alejado de este esperpento educativo nacional. Y mientras las editoriales tragan para seguir vendiendo sus caducos y obsoletos libros de texto, nosotros hemos tomado nota de las posibilidades que ofrece Internet para conseguir esa excelencia académica que tanto aborrecen los políticos. Las hemos puesto en práctica hasta desarrollar un sistema propio de alta eficiencia pedagógica, que supera a la clase presencial y evita que nuestros hijos se estrellen con una ciencia tan maravillosa por culpa de la manifiesta incompetencia y elevada estulticia de los funcionarios españoles y sus bastardos intereses. Nos hemos desplazado hacia donde quieren estar nuestros alumnos y por eso empleamos la plataforma Discord más nuestros propios recursos académicos digitales. Siempre con una comunicación online fluida tanto con ellos como con sus familias. Todos estamos muy satisfechos con las altas metas conseguidas.

El éxito de Quantitas termina produciéndose porque los estudiantes van uno o dos capítulos por delante del temario del profesor. De forma que la clase presencial de la enseñanza reglada termina siendo la clase de refuerzo, no la que hacemos nosotros. Eso entrega una gran seguridad a nuestros alumnos, transformando su actitud en el aula que pasa a ser participativa y mucho más dinámica al entender todo lo que explica su profesor.

Cubrimos la asignatura de matemáticas en los cuatro cursos de la ESO y los dos de Bachillerato en cualquiera de sus ramas:

  1. En secundaria con dos clases semanales de 90 minutos cada una, superando los 2.500 ejercicios.
  2. En bachillerato con dos clases semanales de 120 minutos cada una, superando los 4.000 ejercicios.
  3. En todos los casos garantizamos a nuestros alumnos el mejor rendimiento académico posible